Cómo detectar y tratar los lunares nuevos: lo que debes saber y hacer

Los lunares son una característica común de la piel de muchas personas y, aunque la mayoría son benignos, es importante estar atento a cualquier lunar nuevo que pueda aparecer. En este blog, conoceremos qué buscar al identificar lunares nuevos y los pasos que puedes seguir para reducir el riesgo de desarrollar melanoma o lunares cancerosos. También veremos los diversos métodos de eliminación de lunares y cuándo puede ser necesario ver a un dermatólogo. 

¿Qué son los lunares?

Los lunares son crecimientos de células (melanocitos) en la piel. Pueden variar en tamaño, forma y color y pueden estar presentes desde nacimiento o aparecer con el tiempo.  Si bien la mayoría de los lunares no son dañinos, es importante que un dermatólogo revise cualquier lunar nuevo o cambiante para descartar cáncer de piel. 

Tipos de lunares

Hay varios tipos de lunares que pueden aparecer en la piel:

• Lunares comunes: son pequeños crecimientos benignos de color oscuro y de forma simétrica. Generalmente se encuentran en tronco, cabeza y extremidades.
• Lunares displásicos: son más grandes, tienen formas irregulares y colores desiguales como café, rojo, violeta o negro. Se consideran lunares atípicos y pueden tener un riesgo de convertirse en melanoma.
• Lunares azules: son de color azul o gris y benignos. Se encuentran en la cabeza, el cuello y la parte superior del tronco.
• Lunares Spitz: son benignos de color rosa o rojo. Se encuentran en la cara, piernas y brazos de niños y jóvenes.
• Lunares congénitos: están presentes al nacer y pueden ser de tamaño pequeño o grande. Tienen un mayor riesgo de convertirse en melanoma que otros tipos.

¿Qué son los lunares de carne?

Los lunares de carne son crecimientos benignos (no cancerosos) elevados en la piel que suelen ser de color café oscuro o rojo. Son causados ​​por un crecimiento excesivo de células pigmentadas en la piel. Se encuentran más comúnmente en áreas expuestas al sol, como la cara, los brazos y las piernas.

¿Qué son los lunares de sangre?

Los lunares de sangre son crecimientos benignos en la piel que se componen de una colección alta de vasos sanguíneos. Pueden aparecer como marcas elevadas o planas, rojas, moradas o azuladas en la piel. Algunos pueden ser grandes y asimétricos, y es posible que deban tratarse para eliminarlos. Los lunares de sangre pueden aparecer en cualquier parte de la piel, pero son más comunes en la cara, el cuero cabelludo, el pecho y la espalda. 

¿Cuándo comienzan a salir los lunares?

Los lunares pueden aparecer en cualquier momento de la vida de una persona, pero se ven con mayor frecuencia en las dos primeras décadas de vida. Algunas personas son más propensas a desarrollar lunares que otras y pueden tener más lunares que la persona promedio. 

Los lunares pueden aparecer como resultado de:

• Exposición al sol
• Cambios hormonales
• Genética o herencia
• Factores que afectan el crecimiento de las células pigmentarias de la piel

¿Cómo saber si un lunar es canceroso o maligno?

Es importante controlar cualquier lunar nuevo o cualquier cambio en los lunares existentes. Ya que los cambios de tamaño, forma o color pueden ser signos de cáncer de piel. La Academia Estadounidense de Dermatología recomienda usar la regla "ABCDE" para ayudar a identificar lunares potencialmente cancerosos:

• Asimetría: Un lunar que es asimétrico, lo que significa que una mitad no coincide con la otra mitad.
• Borde: Un lunar que tiene un borde irregular, festoneado o mal definido.
• Color: Un lunar que tiene colores variados, tonos tostados, marrones, negros, rojos, azules o blancos.
• Diámetro: Un lunar que es más grande que el borrador de un lápiz (alrededor de 6 mm o ¼ de pulgada)
• Evolución: Un lunar que ha cambiado de tamaño, forma o color con el tiempo o tiene otros síntomas como sangrado, picazón o formación de costras.

Si un lunar presenta alguna de estas características, es importante consultar a un médico o un dermatólogo, quienes pueden realizar una biopsia para determinar si el lunar es canceroso o no. Recuerda que no todos los lunares cancerosos tendrán todas las características anteriores. Por lo que es importante tener un conocimiento general de los lunares en su piel y consultar a un médico por cualquier lunar que le preocupe.

¿Cuando te tienes que preocupar por un lunar?

Un lunar generalmente no es algo de lo que preocuparse, pero es importante controlar cualquier cambio en el tamaño, la forma, el color o la textura, ya que pueden ser signos de cáncer de piel. Si un lunar se vuelve doloroso, pica o sangra, también debe ser revisado por un dermatólogo. Además, si nota lunares que son asimétricos, tienen bordes irregulares, tienen más de un color o son más grandes que el tamaño de un borrador de lápiz, es importante que un médico los revise.

¿Se puede prevenir la aparición de lunares?

No es posible prevenir por completo la formación de lunares, pero hay acciones que puedes tomar en cuenta para reducir el riesgo de desarrollar lunares nuevos o que los lunares existentes no se vuelvan cancerosos:

• Limite la exposición al sol y use protector solar: los rayos ultravioleta del sol pueden dañar su piel y provocar la formación de nuevos lunares o cambios en los lunares existentes. 
• Cubrirse: use ropa protectora, como camisas de manga larga, pantalones y un sombrero cuando pase tiempo al aire libre.
• Revisa tu piel regularmente: conoce los lunares de tu piel en tamaño, forma y color para que puedas notar cualquier cambio.
• Ser consciente del riesgo: si tiene antecedentes familiares de melanoma, cáncer de piel o muchos lunares, puede tener un mayor riesgo de desarrollar lunares malignos. 

La mayoría de los lunares son benignos y no cancerosos, pero es importante estar al tanto de cualquier cambio en un lunar y que un médico lo revise si es necesario.

¿Cómo quitar los lunares?

Existen varios métodos para eliminar los lunares, entre ellos:

• Plasma pen o láser ionizante
• Extirpación con incisión quirúrgica
• Escisión por afeitado
• Crioterapia
• Eliminación con láser picosure
• Terapia láser CO2
• Electrodesecación

Es importante tener en cuenta que no todos los lunares pueden o deben eliminarse. Por lo que es clave que un especialista evalúe cada caso y recomiende el mejor método según las necesidades de cada paciente. Si un lunar es sospechoso de melanoma, debe ser eliminado por un especialista en cáncer de piel. 

En resumen

En conclusión, los nuevos lunares pueden ser una parte normal del desarrollo de la piel, pero es importante vigilarlos y estar atentos a cualquier cambio. Es una buena idea realizar autoexámenes regulares de la piel y consultar a un dermatólogo si nota lunares asimétricos, con bordes irregulares, de más de un color o más grandes que el tamaño de un borrador de lápiz. Estos podrían ser signos de melanoma, un tipo de cáncer de piel.

Es recomendable visitar a un profesional para examinar con precisión los lunares e identificar un método para eliminarlos según el caso particular de cada paciente. Puedes agendar una cita de valoración gratuita en Quito - Ecuador al 0978784743.