¿Dolor de rodilla? - Tratamiento de ondas de choque
El dolor de rodilla es una de las molestias más comunes que afecta tanto a deportistas como a personas con estilo de vida sedentario. Este problema puede originarse por lesiones, sobrecarga, desgaste articular o inflamación, y si no se trata adecuadamente, puede limitar la movilidad y afectar la calidad de vida.
Índice
- ¿Qué puede causar dolor en las rodillas?
- ¿Qué se debe hacer cuando duelen las rodillas?
- ¿Cómo saber si el dolor de rodilla es por desgaste?
- ¿Cómo puede la terapia de ondas de choque aliviar el dolor de rodilla?
- ¿Qué no hacer después de las ondas de choque?
¿Qué puede causar dolor en las rodillas?
El dolor de rodilla es una de las molestias más comunes en personas de todas las edades. Puede deberse a múltiples causas, entre ellas:
- Tendinitis rotuliana o inflamación del tendón que conecta la rótula con la tibia.
- Desgaste articular (artrosis), que provoca rigidez y dolor al movimiento.
- Lesiones deportivas, caídas o movimientos repetitivos.
- Sobrecarga muscular por ejercicios intensos o exceso de peso.
Este tipo de dolor puede presentarse al flexionar la rodilla, al subir escaleras o incluso en reposo, afectando la movilidad y la calidad de vida.
¿Qué se debe hacer cuando duelen las rodillas?
El primer paso ante un dolor de rodilla persistente es acudir a una evaluación médica. El especialista determinará si se trata de inflamación, lesión o desgaste articular.
Algunas recomendaciones generales incluyen:
- Evitar actividades de alto impacto como correr o saltar.
- Aplicar hielo local para reducir la inflamación.
- Mantener un peso saludable para disminuir la presión sobre las articulaciones.
- Realizar ejercicios de bajo impacto, como natación o bicicleta estática.
Si el dolor no mejora con estas medidas, puede ser momento de considerar terapias avanzadas como las ondas de choque.
¿Cómo saber si el dolor de rodilla es por desgaste?
El desgaste articular o artrosis se presenta cuando el cartílago que recubre los huesos se va deteriorando.
Algunos signos que indican este problema son:
- Dolor profundo al mover la rodilla o al estar de pie mucho tiempo.
- Crujidos o chasquidos al flexionar la articulación.
- Inflamación leve y sensación de rigidez matutina.
- Dificultad para extender completamente la pierna.
Una radiografía o ecografía puede confirmar el diagnóstico y ayudar al médico a definir el tratamiento más adecuado.
¿Cómo puede la terapia de ondas de choque aliviar el dolor de rodilla?
La terapia de ondas de choque es una técnica médica moderna utilizada para tratar lesiones musculares, tendinosas y articulares sin cirugía.
Consiste en la aplicación de ondas acústicas de alta intensidad que estimulan la circulación, reducen la inflamación y promueven la regeneración del tejido dañado.
En casos de tendinitis rotuliana o dolor crónico de rodilla, las ondas de choque ayudan a:
- Acelerar la reparación de los tejidos afectados.
- Disminuir el dolor y la inflamación.
- Mejorar la movilidad y función de la rodilla.
- Reducir la necesidad de medicamentos o infiltraciones.
Generalmente se recomiendan entre 3 y 5 sesiones, dependiendo del tipo y gravedad de la lesión.
¿Qué no hacer después de las ondas de choque?
Después del tratamiento, se recomienda seguir algunas precauciones para asegurar los mejores resultados:
- Evitar ejercicios intensos o actividades de impacto por 48 horas.
- No aplicar hielo ni masajes fuertes sobre la zona tratada.
- No combinar con antiinflamatorios sin recomendación médica.
- Mantener una hidratación adecuada y seguir las indicaciones del especialista.
Con cuidados adecuados, la mayoría de los pacientes experimentan mejoría progresiva del dolor en las semanas posteriores al tratamiento.
Conclusión
El dolor de rodilla puede tener diversas causas, desde una tendinitis rotuliana hasta un desgaste articular crónico. La terapia de ondas de choque se presenta como una alternativa eficaz, segura y no invasiva para reducir el dolor, regenerar tejidos y recuperar la movilidad.
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